2.1.14

Servicio técnico, una visita a domicilio paga

Por segunda vez me encuentro desembolsando una suma de dinero, para mí significativa, por una visita del servicio técnico.
En este caso se trata de ver la heladera y el freezer, una Candy que tiene más de 15 años.
Al llamar a Alpar, el servicio técnico autorizado, informan que  la visita tiene un costo que será descontado en caso de aceptar su reparación.
En nosotros desde ya estaba la voluntad de arreglarla porque resultó buena y está medianamente en buenas condiciones.
Pero el técnico nos dijo simplemente que hoy en día no se justifica el arreglo porque, no se consiguen los repuestos originales y en el supuesto caso de necesitar un cambio de motor con mano de obra incluida, estaríamos pagando un valor mayor al de un electrodoméstico nuevo.
Hace un par de años sucedió lo mismo con un  televisor. En aquella oportunidad también se trató de un servicio técnico autorizado, Radio Victoria, que nos presupuestó un valor inverosímil.
En ambos caso, por recomendación de los propios técnicos, tenemos que resolver la compra de un nuevo producto, sabiendo que hoy en día los electrodomésticos son descartables en un par de años.
Evidentemente el servicio técnico autorizado es en la actualidad un servicio de visita a domicilio paga, donde a lo sumo podes obtener asesoramiento o recomendación sobre la nueva compra.
Como no hay dos sin tres, según el refrán, la próxima vez ya no recurriré a un servicio inútil sino que habrá que evaluar qué comprar y descartar.

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