Arriba el título, abajo el honor

Lamentablemente para muchos el título profesional respalda su nombre.
No se dan cuenta cuan difícil es lograr ser un SEÑOR con mayúsculas (persona elegante, educada y de nobles sentimientos; un auténtico señor).
Claro es más fácil ir detrás de un título universitario, aunque haya que estudiar 5 o 6 años, que llegar a ser señor, cualidad que deberían ganar año tras año, día tras día, con hombría.

Desde hace muchos años Gus viene diciendo que su fantasía sería tener un gran escritorio con un cartelito que ostentara el título: Licencioso.
Obviamente lo primero que nos viene a la mente al ver Lic. Fulanito de Tal es - el tipo es licenciado.
Pero Gus, en un juego de palabras, haría referencia a licencioso (atrevido, disoluto, inmoral).
Darse el gustito sería dar paso a la sátira del título académico.

Sin embargo hay quienes fueron más allá y se autotitularon, haciéndose llamar ingeniero, licenciado, etc..., haciendo alarde de una farsa. En ellos encontramos a los verdaderos licenciosos.

¿Cuántos títulos truchos más aparecerán?
¿Cuántos más necesitan un título para respaldar su nombre?